Cuándo sucede el arte (Parte 1)
Entrevista con Carlos Bretón, Director del Centro de Documentación de las Artes Visuales en Tlaxcala
¿Cuándo sucede el arte contemporáneo? Sabemos que no nació espontáneamente en una fecha o evento específicos. Tampoco comienza con un acto concreto como cruzar el umbral de un museo, conseguir la aprobación de la crítica o ser manifestación de un modelo filosófico. El arte sucede en parte cuando es creado, es visto, circula y es adquirido. Sucede y afecta tanto un tiempo/espacio real como natural, también acontece en la memoria.
En muchos sentidos nuestro arte actual debe su visibilidad internacional y prestigio al “impuso archivístico” de los artistas, al posterior engranaje de investigaciones/exhibiciones - que recién empiezan a perfilar una historiografía del arte contemporáneo mexicano-, también ha dependido de la conformación de espacios que conserven y analicen su memoria.
En México los archivos artísticos se enfrentan a un escenario hostil en el que la relectura es administrada por el gobierno y escasean profesionales en el área que contrapesen la tendencia. En Tlaxcala el escenario además ha adquirido rezago. Es prácticamente imposible corroborar, incluso saber de cualquier acontecimiento artístico, si no es a través del voto de confianza en la memoria oral u oficial.
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El año pasado llamó la atención una convocatoria publicada por la Red de Museos del ITC, en la que invitaba a la comunidad artística a donar todo tipo de registro para la conformación de un Centro de Documentación de las Artes Visuales en Tlaxcala…
Es una necesidad que viene de muchas carencias. Es importante saber cuáles son las necesidades de los museos en cada una de sus aristas a largo plazo. Los museos juegan
muchas funciones, cumplen muchos mandatos y ejes controlados por el ICOM. Además de la difusión debe concentrar información y generar investigaciones. Uno de los elementos fundamentales son los archivos, si se carece de ellos, las iniciativas desde lo institucional y desde lo independiente que se quedan dispersas. La sistematización de archivos es un patrimonio que nos da memoria vigente.
¿Qué le pasa a un museo si no cuenta con un centro de documentación?
Por normatividad los espacios deben contar con un espacio de esta naturaleza. Un museo que no tiene un acervo que investigar, es una galería. No es demeritar. Las galerías cumplen una función específica pero no es el perfil. Un centro de documentación permite investigar la propia colección y propiciar patrones que profesionalicen los cursos curatoriales de las exposiciones.
La figura del museo además legitima. Eso es un problema si éste no tiene un perfil completo.
Así es, el hecho de que un artista penetre obras en el espacio del museo le legitima. Tener un centro de documentación dota al propio museo de un status y le ayuda en esas funciones. Cada espacio debe tener su centro.
¿Qué entiende el Centro de Documentación por arte?
Más que detenerse en el concepto del arte, entiende la necesidad de concentrar información relativa a arte para generar condiciones de profesionalización que posteriormente permitan comprender qué es el arte. Busca dotar al investigador, historiador o el curador de herramientas desde una posición neutral.
¿Qué adquiere y recibe como donación?
El proyecto es claro, recopila todo material que tenga que ver con el acontecer de las artes visuales en Tlaxcala en los 25 años anteriores. Se extiende en un arista de posibilidades creativas, no sólo en lo que en lo que se comprende como artes plásticas. Juntamos carteles, currículos, material hemerográfico. Todo el material que se emite de la exposiciones, documentación que se genera a través de las instancias -como procedimientos de préstamos y solicitudes-.
Parece un universo de información ¿Al enfrentar el material cómo empiezan a dividirlo?
Las dos personas que ingresaron fueron capacitadas en nociones de las artes visuales y ya habían tenido contacto con archivos. Como método seguimos un guión de Bellas Artes con parámetros de registro de piezas y elementos de acervo. El material se clasifica en fondos - Museos, ITC, espacios de formación- y posteriormente en secciones -carteles, catálogos siguen subsecciones y así te vas tratando de sistematizar la localización. Las obras adquiridas o donadas tienen un fondo especial.
¿Qué hay del balance de esos fondos? ¿Hay unos de esfuerzos independientes?
Sí, hay un fondo de “Colectivos y Acciones Independientes”. La acogida más fuerte fue por parte de los artistas jóvenes -no de los oficiales- quienes parecen especialmente interesados en que su obra sea discutida en el futuro. Ello nos permite entender que la instancia cultural no puede cargar con todo el esfuerzo y devenir de lo que pueda suceder, si bien juega un papel importante, creo que el factor fundamental en la creación nace desde los artistas, los colectivos, las galerías, centros culturales y la comunidad que se apropia de ese patrimonio.
Aunque mucho del material viene directamente de los artista imagino que la mayoría del material está conformado con material institucional, es quien tiene más herramientas para generar memorias.
Exactamente, además de tener recursos económicos y humanos es uno de sus mandatos. Sin embargo insisto en la importancia que tiene el material de fuente independiente. Da otra lectura a lo que ya tenemos.
¿Cómo procura el Centro de Documentación su propia longevidad?
No sólo debes tener la idea y quedarte en el intento. El trabajo in situ de catalogación es arduo y no se ve. Es lento. Lo importante es dar un primer paso certero y fundar el centro con el apoyo de muchos artistas y muchos colaboradores. No bajar la guardia en gestión de recursos, el trabajo archivístico también es permanente.
¿Cómo funcionará en el futuro?
La otra es tener un espacio ex profeso para el acervo conformado. Con apoyo del CONACULTA, el centro pasará a formar parte del Museo de Arte de Tlaxcala y
probablemente pueda estar abierto a finales de año. Esto no sólo va ayudar al Museo al posicionarlo. Una vez teniéndolo a los directivos , ellos van a tener la necesidad de generar recursos para hacer su funcionamiento cada vez más eficiente. También depende mucho del impulso de los agentes que ayudaron a conformar la primera etapa y de su exigencia por continuidad.
Suplemento cultural ARTERIA | El Sol de Tlaxcala
Mayo 5 de 2015.
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Entrevista con Carlos Bretón, Director del Centro de Documentación de las Artes Visuales en Tlaxcala
¿Cuándo sucede el arte contemporáneo? Sabemos que no nació espontáneamente en una fecha o evento específicos. Tampoco comienza con un acto concreto como cruzar el umbral de un museo, conseguir la aprobación de la crítica o ser manifestación de un modelo filosófico. El arte sucede en parte cuando es creado, es visto, circula y es adquirido. Sucede y afecta tanto un tiempo/espacio real como natural, también acontece en la memoria.
En muchos sentidos nuestro arte actual debe su visibilidad internacional y prestigio al “impuso archivístico” de los artistas, al posterior engranaje de investigaciones/exhibiciones - que recién empiezan a perfilar una historiografía del arte contemporáneo mexicano-, también ha dependido de la conformación de espacios que conserven y analicen su memoria.
En México los archivos artísticos se enfrentan a un escenario hostil en el que la relectura es administrada por el gobierno y escasean profesionales en el área que contrapesen la tendencia. En Tlaxcala el escenario además ha adquirido rezago. Es prácticamente imposible corroborar, incluso saber de cualquier acontecimiento artístico, si no es a través del voto de confianza en la memoria oral u oficial.
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El año pasado llamó la atención una convocatoria publicada por la Red de Museos del ITC, en la que invitaba a la comunidad artística a donar todo tipo de registro para la conformación de un Centro de Documentación de las Artes Visuales en Tlaxcala…
Es una necesidad que viene de muchas carencias. Es importante saber cuáles son las necesidades de los museos en cada una de sus aristas a largo plazo. Los museos juegan
muchas funciones, cumplen muchos mandatos y ejes controlados por el ICOM. Además de la difusión debe concentrar información y generar investigaciones. Uno de los elementos fundamentales son los archivos, si se carece de ellos, las iniciativas desde lo institucional y desde lo independiente que se quedan dispersas. La sistematización de archivos es un patrimonio que nos da memoria vigente.
¿Qué le pasa a un museo si no cuenta con un centro de documentación?
Por normatividad los espacios deben contar con un espacio de esta naturaleza. Un museo que no tiene un acervo que investigar, es una galería. No es demeritar. Las galerías cumplen una función específica pero no es el perfil. Un centro de documentación permite investigar la propia colección y propiciar patrones que profesionalicen los cursos curatoriales de las exposiciones.
La figura del museo además legitima. Eso es un problema si éste no tiene un perfil completo.
Así es, el hecho de que un artista penetre obras en el espacio del museo le legitima. Tener un centro de documentación dota al propio museo de un status y le ayuda en esas funciones. Cada espacio debe tener su centro.
¿Qué entiende el Centro de Documentación por arte?
Más que detenerse en el concepto del arte, entiende la necesidad de concentrar información relativa a arte para generar condiciones de profesionalización que posteriormente permitan comprender qué es el arte. Busca dotar al investigador, historiador o el curador de herramientas desde una posición neutral.
¿Qué adquiere y recibe como donación?
El proyecto es claro, recopila todo material que tenga que ver con el acontecer de las artes visuales en Tlaxcala en los 25 años anteriores. Se extiende en un arista de posibilidades creativas, no sólo en lo que en lo que se comprende como artes plásticas. Juntamos carteles, currículos, material hemerográfico. Todo el material que se emite de la exposiciones, documentación que se genera a través de las instancias -como procedimientos de préstamos y solicitudes-.
Parece un universo de información ¿Al enfrentar el material cómo empiezan a dividirlo?
Las dos personas que ingresaron fueron capacitadas en nociones de las artes visuales y ya habían tenido contacto con archivos. Como método seguimos un guión de Bellas Artes con parámetros de registro de piezas y elementos de acervo. El material se clasifica en fondos - Museos, ITC, espacios de formación- y posteriormente en secciones -carteles, catálogos siguen subsecciones y así te vas tratando de sistematizar la localización. Las obras adquiridas o donadas tienen un fondo especial.
¿Qué hay del balance de esos fondos? ¿Hay unos de esfuerzos independientes?
Sí, hay un fondo de “Colectivos y Acciones Independientes”. La acogida más fuerte fue por parte de los artistas jóvenes -no de los oficiales- quienes parecen especialmente interesados en que su obra sea discutida en el futuro. Ello nos permite entender que la instancia cultural no puede cargar con todo el esfuerzo y devenir de lo que pueda suceder, si bien juega un papel importante, creo que el factor fundamental en la creación nace desde los artistas, los colectivos, las galerías, centros culturales y la comunidad que se apropia de ese patrimonio.
Aunque mucho del material viene directamente de los artista imagino que la mayoría del material está conformado con material institucional, es quien tiene más herramientas para generar memorias.
Exactamente, además de tener recursos económicos y humanos es uno de sus mandatos. Sin embargo insisto en la importancia que tiene el material de fuente independiente. Da otra lectura a lo que ya tenemos.
¿Cómo procura el Centro de Documentación su propia longevidad?
No sólo debes tener la idea y quedarte en el intento. El trabajo in situ de catalogación es arduo y no se ve. Es lento. Lo importante es dar un primer paso certero y fundar el centro con el apoyo de muchos artistas y muchos colaboradores. No bajar la guardia en gestión de recursos, el trabajo archivístico también es permanente.
¿Cómo funcionará en el futuro?
La otra es tener un espacio ex profeso para el acervo conformado. Con apoyo del CONACULTA, el centro pasará a formar parte del Museo de Arte de Tlaxcala y
probablemente pueda estar abierto a finales de año. Esto no sólo va ayudar al Museo al posicionarlo. Una vez teniéndolo a los directivos , ellos van a tener la necesidad de generar recursos para hacer su funcionamiento cada vez más eficiente. También depende mucho del impulso de los agentes que ayudaron a conformar la primera etapa y de su exigencia por continuidad.
Suplemento cultural ARTERIA | El Sol de Tlaxcala
Mayo 5 de 2015.
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